Dr. Antonio Barrasa Shaw · Especialista en Cirugía de Pared en Clínica Serralta
Muchos pacientes a los que les indicamos la solución definitiva de su problema de hernia mediante el tratamiento quirúrgico nos preguntan en la consulta de que material están hechas las mallas que utilizamos para reparar los defectos herniarios. Os comentaremos algunas cosas al respecto de la reparación de la hernia con malla (o “libre de tensión”) e intentaremos explicaros de que están hechas las mallas.
El principio del uso de mallas en la reparación de las hernias es el realizar la reparación sin tensión. Esta ha sido la diferencia fundamental con el antiguo tratamiento quirúrgico de las hernias. Como sabéis la hernia es un “agujero” o defecto en la continuidad de los tejidos resistentes del cuerpo. Cuando ese defecto se produce en la zona inguinal se llama hernia inguinal (que es la más frecuente, y que se produce en mas del 80% de los casos en los varones. Otras hernias son la hernia umbilical -del ombligo- o las que se producen sobre otras cicatrices previas). El único tratamiento posible de cualquier hernia es la operación quirúrgica, que consiste en “cerrar el agujero”, es decir, reparar el defecto.
Visualización de una hernia inguinal a través del laparoscopio
Para ese cierre se utilizaban antes puntos de sutura que aproximaban los tejidos de los bordes del defecto. Pero estas técnicas de cierre con sutura resultaban en una tensión entre los bordes del defecto. Esa tensión hacía que la reparación se pudiera romper, con la consecuente “reapertura” o recidiva de la hernia. Esta recidiva se llegaba a producir aproximadamente en un 30% de los casos, y en algunas series con un porcentaje todavía mayor.
Un momento importante en la historia de la reparación de la hernia inguinal se inicia desde 1945 cuando el cirujano canadiense Earle Shouldice desarrolló los conceptos básicos de su propuesta de reparación de las henia en el hospital que lleva su nombre. Esta propuesta de reparación consiste en aproximar los bordes del defecto, pero habiendo hecho antes unas maniobras de disección de los tejidos que permitieran suturar los bordes sin que hubiese tensión en el cierre.
En una serie que en 1992 incluía 200.000 hernias inguinales reparadas según esta técnica con una recurrencia del 1%. Pero el procedimiento de Shouldice continua siendo un “cierre con puntos”
Basado en este concepto de reparación “sin tensión” surgieron los intentos de reaparar las hernias mediante el uso de materiales que permitieran “reconstruir” los tejidos, sin tener que suturarlos a tensión. De esta forma, se coloca una especie de “parche” de material que repara el defecto de la hernia.
En 1958, Usher fue el iniciador de la aplicación de redecilla de Marlex para reparar las hernias inguinales e incisionales sin tensión.
El Dr Irving L. Lichtenstein, en 1968, inició a su vez la reparación herniaria con redecilla de Marlex y junto con sus colaboradores comenzó a emplear en 1986 el término «hernioplastia sin tensión» para describir una técnica quirúrgica en la cual se coloca un parche de redecilla y se sutura el defecto de la hernia inguinal sin reparación primaria. Las series publicadas con el uso de esta técnica hablan de una recidiva inferior al 0,3%.
Nuestro Servicio de Cirugía ha asimilado la técnica de Lichtenstein en sus principios básicos, añadiéndole las modificaciones que han sido propuestas por otros autores con el tiempo y que han ido mejorándola. La técnica de reparación de la malla sin tensión según Lichtenstein es en estos momentos la técnica básica de reparación de la hernia inguinal usada en nuestro servicio. En nuestras manos la presencia de recidiva es inferior al 0,1%.
En cualquier caso, se debe individualizar el tratamiento en cada caso, y nuestros profesionales le aconsejaran sobre el mejor método en su caso particular (posible abordaje laparoscópico, otras técnicas…)
Dependiendo del tipo de hernia se utilizan varios materiales, y estos se están actualizando por la industria farmaceútica de forma constante.
En general, para la reparación de la hernia inguinal se utiliza en nuestro servicio utilizamos el tejido de monofilamento de polipropileno.
Material utilizado para la fabricación de malla para hernias
El monofilamento de polipropileno es un tejido sintético, que se integra en la pared del paciente que la recibe. Su proceso de fabricación está protegido por patentes internacionales, como es lógico. Tiene uso en múltiples campos además de la cirugía (agricultura, textil, construcción, etc…). Consiste en una “redecilla” (ver la foto) que permite a las células del tejido humano integrarse entre sus fibras y formar un tejido resistente.
Resistente en el sentido de soportar muy bien la tensión sobre sus bordes. Además ha demostrado una aceptación por el organismo muy alta, siendo un material muy biocompatible. Es un material que se “integra” en el tejido humano. Son muy raros los casos de rechazo de la malla de monofilamento de polipropileno.
La ultima generación de mallas de monofilamento de polipropileno permite el “autoadhesivo” a los tejidos humanos, con lo que se elimina la necesidad de sutura de los bordes. Este procedimiento también está incorporado entre nuestras prestaciones.
En otros tipos herniarios distinto del inguinal se usan otros materiales, como el goretex. Su especialista en cirugía le aconsejara del mejor material en su caso.
No dudes en consultarnos ante cualquier duda, solicita tu cita: 961 135 180
Para informarte dobre las características de las mallas y poder visualizarla en vivo, consulta el siguiente artículo: Cómo es la malla que se utiliza para reparar las hernias
Otros links de interés:
· Hernia Inguinal. Técnicas y Precios
· Hernia Umbilical. Técnicas y Precios