Cirugía Hepato-Bilio-Pancreática. Clínica Serralta
La colelitiasis, también conocida como «tener piedras en la vesícula«, es una patología muy frecuente que en muchas ocasiones no presenta ningún síntoma y se suele diagnosticar por casualidad al realizar alguna prueba médica por otro motivo (generalmente mediante una ecografía abdominal).
No obstante, cuando sí que se manifiesta, el síntoma más común suele ser un dolor abdominal fuerte y continuado en la zona superior derecha que se desencadena tras comidas copiosas o ricas en grasas y es lo que se conoce como cólico biliar. Éste se produce cuando una piedra obstruye el conducto de salida de la bilis de la vesícula.
Las piedras de la vesícula se generan por acumulación y sedimentación de los fluidos que se producen en la misma, denominados sales biliares. El símil más parecido es como los posos que quedan en una taza de café. En función del tiempo transcurrido y de los movimientos de la vesícula estos depósitos van adquiriendo formas redondeadas, se van endureciendo como una piedra y adquieren mayor tamaño.
La forma, composición y número total de piedras es variable de una persona. Al contrario de lo que se cree, las piedras pequeñas son mucho más peligrosas que las grandes, ya que tienen más riesgo de escapar de la vesícula a través de su conducto de salida y obstruir la vía principal del hígado.